Reseña #174 Cuerpos sonoros

lunes, 5 de octubre de 2020

 

Reseña de Natalia Beroiz
Libro: Cuerpos sonoros
Género: Novela gráfica
Autora: Julie Maroh
Editorial: Dibbuks
Colección: Autoconclusivo
Número de páginas: 305
Formato: Rústica con solapas 
Edición: 2017

Sinopsis
En Montreal, como en todas las ciudades, las parejas se juntan y se separan. Los individuos se atraen y se repelen unos a otros en un vals perpetuo de cuerpos. Los cuerpos sonoros son aquellos que laten, que se entrelazan en destinos diferentes a la par que familiares, unidos por este sentimiento indescriptible que mueve el mundo: el amor. Veintiún relatos cortos que nos muestran los diferentes tipos y etapas de las relaciones amorosas o del deseo, sin importar el género, la sexualidad, la edad o la condición. Rupturas que queman, amistades con derecho a roce resignadas, familiares unidos, amores juveniles, deseos irrefrenables, poliamores incomprendidos. Historias que nos llegan al corazón en forma de disparo emocional. Porque es la gran fuerza de Julie, habla de sentimientos como si fuesen olores, sensaciones o palabras que entendemos todos.

Opinión personal
Cuerpos sonoros es una novela gráfica que me sacó totalmente de mi zona de confort. Dejé por un lado los superhéroes y villanos de DC, Marvel e Image cómics para adentrarme al universo de la historietista francesa Julie Maroh. Me encontré con una obra ambiciosa, arriesgada, con una prosa tímida y al mismo tiempo atrevida que logra marcar la diferencia entre sus compañeras. Una obra que te deja pensando y un sin fin de sentimientos muy dentro de cada lector. 

La novela gráfica se compone de 21 historias cortas que transcurren en Montreal y tocan principalmente el tópico del amor y desamor en sus miles de formas. Me gusta con la libertad que se habla y los inexistentes estereotipos que componen cada viñeta. Reitero: para mi fue una experiencia totalmente nueva el encontrarme con una novela gráfica de este índole, porque me corrió totalmente de mi lugar seguro. Me encontré con muchas historias que no solo hablan y muestran al amor, sino también la decepción, lo incomprensible, lo extraño, de una forma en la que nada parece distinto. Somos todos cuerpos que laten y se entrelazan por cuestiones del destino. Acá todo está permitido y es normal, nadie te tiene que porqué mirar de mala manera porque no te comprende. Cuerpos sonoros es una bandera blanca de paz. 

La portada es la única musa teñida de colores fríos. El interior de la historia se compone de viñetas en blanco y negro con unas pequeñas variaciones en cuanto a la luz y saturación, jugando un poco con la visión del lector. En lo personal me siento un poco en contra con la modalidad de la edición, es un libro muy grande, pesado y esto se lo atribuyo al haberse usado un gramaje muy alto en las páginas. Sé que esta decisión editorial debe tener relación por la calidad de los trazos que componen las ilustraciones, pero una parte de mi está un poco en contra de la cantidad de papel que se usa por cada uno de estos ejemplares y de los espacios en blanco en demasía. Reitero: al ser estudiante de edición puedo llegar a entender varias decisiones editoriales tomadas a la hora de crear el formato de la novela, pero yo principalmente no lo comparto. Creo que el libro podría pesar la mitad de lo que pesa y haberse ahorrado la mitad de la materia prima utilizada y aun así haber logrado una pieza única. 

Las cuestiones físicas van a ser mis únicas críticas y las razones para no puntuar esta historia gráfica con 5 puntos. Si quieren incursionar por el mundo de las novelas gráficas sin caer en los típicos cómics de superhéroes los invito a probar con Cuerpos sonoros, una historia en donde todos somos protagonistas y nadie puede ser discriminado.