Reseña de Natalia Beroiz
Libro: Las hijas del frío
Género: Thriller sueco
Autora: Camilla Läckberg
Editorial: Océano
Colección: Los crímenes de Fjällbacka #3
Número de páginas: 496
Formato: bolsillo, rústica
Edición: 2018
Sinopsis
La escritora Erica y su pareja el comisario Patrik acaban de tener una hija, y aún se están adaptando a los cambios en su hogar, cuando un pescador encuentra el cadáver de la pequeña Sara, la hija de una amiga cercana de Erica. Al principio todo indica que se trata de un trágico accidente, pero la autopsia revela que la niña fue ahogada en una bañera antes de ser arrojada al mar. Cuando, pocos días después, otro niño es atacado, el pánico cunde en Fjällbacka y Patrik, muy afectado, llega incluso a temer por la seguridad de su propia hija.
Opinión personal
La maternidad no es fácil y a pesar de que muchas series, películas y libros se toman el trabajo de dibujarla como algo simple y bonito, no siempre suele ser así. Tanto Erica como Patrik están muy felices por la llegada de Maja a su hogar, sin embargo, el hecho de que la protagonista pase tanto tiempo sola con la niña y Patrik esté trabajando durante varias horas, dificultan los primeros meses de vida de la pequeña. La relación entre ambos adultos tiene sus momentos tensos, pero así y todo el respeto y amor del uno por el otro son los motores que ayudan a que la relación continúe y con el tiempo se haga más fuerte.
Cuando Patrik trabaja, Erica aprovecha no solo a acostumbrarse a su hija, sino también a verse con una amiga del barrio que hace unos meses fue mamá por segunda vez y la está aconsejando y ayudando con Maja. Sin embargo, un día Patrik llega con la noticia más terrible de todas: la hija mayor de la amiga de Erica ha sido encontrada muerta. Todo apunta a que fue un accidente, pero cuando los primeros datos de la autopsia salen a la luz, se darán cuenta que lo que le sucedió a la pequeña Sara fue intencional.
A raíz de esto, Erica no solo se convertirá en un importante sostén para su amiga sino también para su pequeña familia. La muerte de Sara despertó los peores temores de los recientes padres y Patrik se toma muy a pecho esta investigación, que pondrá en mira a todo aquellos que sean parte del círculo íntimo de la pequeña Sara e incluso a aquellas personas no tan directas pero que pueden llegar a tener que ver con el caso.
En paralelo a esta trama principal, como recurso habitual de la escritora, tenemos el relato en primera persona de los personajes secundarios: algunos compañeros de trabajo de Patrik, su jefe, Ana (hermana de Erica) y otros tantos más. Las tramas secundarias ayudan a mantener el ritmo activo y fresco de la historia, que a pesar de que repite recursos literarios ya utilizados, esto hace que el lector vuelve a aceptar y maravillarse con la tercera entrega de esta saga de misterios y crímenes difíciles de resolver.
El asesinato de un niño siempre es un hecho atroz, por lo que causará un revuelo importante en la ciudad, más aún cuando empiezan a aparecer niños atacados por quien presuntamente es el asesino de Sara. La carrera está contra reloj y tanto Patrik como el resto del equipo de la comisaría, deben hacer todo lo posible para que ningún otro niño sufra consecuencias irreversibles. Podríamos decir que esta vez, el gran crimen en cuestión, les pegó muy cerca a los personajes principales, por lo que es irrevocable la responsabilidad parental y el pensar en el futuro de su hija a raíz de los extraños casos que están comenzando a ser cada vez más frecuentes en Fjällbacka.
El tercer libro de la saga toca temas duros como los problemas de matrimonio y las relaciones familiares tortuosas. Un detalle que siempre destaco de la autora, es que narra y mezcla el pasado con el presente con una precisión casi quirúrgica provocando que el lector nunca pierda el hilo de la historia y al mismo tiempo absorbe muchísima información complementaria, que se va a ir transformando en la gran trama final.
Camilla Läckberg es una autora que destaca por escribir personajes femeninos fuertes y este libro no es la excepción. Nos muestra la vulnerabilidad y fortaleza de las mujeres en cada uno de sus extremos, brindándole al lector una trama diferencial y adictiva.
Mi puntuación para Las hijas del frío es de 4/5.
