Reseña #126 Él dice, ella dice

lunes, 28 de octubre de 2019


Libro: Él dice, Ella dice
Género: Thriller
Autora: Erin Kelly
Editorial: Harper Collins
Colección: autoconclusivo
Número de páginas: 480
Formato: Rústica con solapas
Edición: 2019 

Sinopsis
Kit y Laura son la joven pareja perfecta, unidos por su amor a los eclipses y su deseo de viajar por el mundo para ser testigos de estos fenómenos naturales. En el silencio, tras un eclipse de sol, en un festival en Cornwall, Laura es testigo de una agresión sexual. Ella y su novio Kit llaman a la policía, y meses después ambos declararan en el juicio. En ese momento cuatro vidas cambiarán para siempre.

Quince años después. Laura y Kit viven aterrorizados. Mientras Laura sabe que hizo bien en denunciar el crimen también sabe que nunca puedes ver la imagen completa. Algo siempre se queda escondido… algo que nunca habría imaginado.


Opinión personal 
Hace mucho mucho que no leía un thriller que me cautivara tanto, como me pasó con La chica del tren. De hecho ambos libros se asemejan en un montón de sentidos. Este año me encontré también con Conejo blanco, lobo rojo pero no deja de ser un thriller juvenil, que juega con el límite de lo distópico. Por otro lado, “Él dice, ella dice” es un libro para lectores no tan jóvenes, que te mantiene constantemente tensionado, buscando en cada detalle y entre cada línea.

Kit y Laura se conocen casi sin querer y comienzan a salir poco a poco. Ambos personajes se destacan por ser sencillos, personas comunes y corrientes a las que no les pasan cosas extraordinarias o sobrenaturales. Simplemente son un hombre y una mujer que se conocen y comienzan a salir. Kit es fanático de los eclipses. Tan fan que hasta hizo la cuenta de cuántos eclipses habrá en toda su vida, con la intención de ir a ver cada uno de ellos. Laura, por otro lado, es una mujer que tira más a lo social, no tanto a lo científico. Sin embargo, apoya totalmente el deseo de su pareja y promete ser su compañera de toda la vida en busca de esos fenómenos naturales que Kit tanto ansía ver. Pero un día, kilómetros lejos de casa, luego de haber visto un eclipse, Laura y su pareja van caminando por el bosque y ella encuentra a una mujer siendo sexualmente abusada. O por lo menos esta es la percepción de la escena que tiene Laura. Enseguida la joven quiere ayudar a la mujer que está indefensa. Kit, en un comienzo está medio reacio a la idea de meterse en un problema tan complicado. Pero Laura, testaruda y gran defensora de los derechos de las mujeres, quiere a toda costa ayudar y denunciar.

Claro que ninguno de los dos pensó que ser testigo de este hecho les iba a cambiar la vida rotundamente. Tuvieron que ser testigos del juicio y posteriormente comenzaron a ser perseguidos por su pasado, un pasado que no los dejaba avanzar y seguir adelante sin mirar atrás. Continuamente este eco estaba recordándoles qué había pasado. Y sobretodo: qué podría llegar a pasar, si no hacen algo al respecto.

A veces es difícil hacer una reseña de un libro del cual querés contar todo, pero al mismo tiempo querés que el lector se sorprenda y recorra los mismos pasos que vos recorriste. Con los thrillers me pasa que a veces más es menos y menos es más, entonces me siento muy frustrada porque quiero que lo lean, que se sorprendan, pero tampoco quiero traerles una reseña mediocre. Los personajes a lo largo de la trama van mostrando su lado humano, eso que nos transmite una historia que combina thriller con realismo, por lo que tranquilamente el lector se siente muy allegado a ellos. 

En este caso puntual, no voy a decir que el libro me volvió loca. Sí les advierto que al principio me pareció un poco/bastante denso. Pero es de esas historias que van tejiendo detalladamente diferentes puntos, para luego hacer una gran conexión final en la que te quedas con la boca abierta. Al comienzo de la reseña les dije que me hizo acordar mucho a La chica del tren. Estos thrillers se asemejan un montón y en el caso puntual de Él dice, ella dice, en vez de una desaparición, tenemos el caso de una violación. Tópico que está este último tiempo en auge, por la relevancia del tema y porque además cada autor (por lo menos los que he leído este año) busca darle distintas funcionalidades a esta aberración.

Este 2019 estuvo muy marcado para mi en cuanto a la cantidad de libros que leí sobre abusos. Confieso que a veces me daba miedo saber con qué me iba a encontrar, pero tengo que mencionar que cada autor que leí siempre, SIEMPRE, trató este tópico con muchísimo respeto y cada uno siempre quiso dejar su huella, armando una historia compleja y llena de contenido fructífero. El gran conflicto que se repite en varias ocasiones es la tensión entre la verdad y la mentira. Las dos caras de un solo problema. Este libro puntualmente se destaca por ser totalmente brusco (pero también verdadero y realista) al mostrar cómo el acusado intenta desestimar a la víctima y cómo los juicios son instancias dolorosas, para las familias, para la víctima (por supuesto) y para los testigos. 

Toda la trama está confeccionada de misterios, tensión y un borde muy fino entre lo que es real y lo que no. A mi particularmente al principio me costó engancharme con la historia, pero una vez que le fui encontrando la vuelta de tuerca, no me pude despegar de sus páginas. Es un libro largo, ágil de leer, pero con algunos momentos un poco pesaditos. No creo que sea de aquellos libros que te cambian la vida, la forma de pensar o que por lo menos dejan un huella en vos, pero si te gusta probar con los bestsellers y saber de qué está hablando todo el mundo, es una buena opción.

  • Mi puntuación es de 4/5